EL INEXPLICABLE FENOMENO CELESTE OBSERVADO EN NUREMBERG EN 1561 ¿ UNA BATALLA DE OVNIS?



Hans Glaser, 1566 (Biblioteca Central de Zurich, Suiza)


Uno de los episodios celestes masivamente observados más insólitos de la historia es, sin lugar a duda, aquél visto y descrito por los habitantes de Nuremberg, Alemania, al amanecer del 14 de abril de 1561. En una octavilla elaborada en madera en 1566 por el artista Hans Glaser se describe y grafica, con cierta ingenuidad pictórica, dicho inusual evento. Dicha representación (foto superior) se conserva en la colección Wickiana, en la biblioteca central (Zentralbibliotel) de Zúrich. En esta colección también se incluye una ilustración sobre un fenómeno celeste acaecido en Basilea en 1566.
Esta octavilla procede de Núremberg y cuenta la nueva de una «muy aterradora aparición» en el cielo de la ciudad al momento de la salida del Sol, en dicha fecha de de 1561.
Según la descripción de la Gazeta de Nuremberg, "fue vista «por muchas personas, varones y mujeres». Eran docenas o talvez cientos de «esferas» de color rojo sangre, azulado y negro, o «discos anulares», que surgían de dos inmensos cilindros negros, cerca del Sol, «tres por ejemplo en fila,
a veces cuatro formando un cuadrado, y también algunas solas,
y también se han visto entre esas esferas algunas cruces de color sangre»
Había también «dos grandes tubos» «en cuales pequeños y grandes tubos
estaban de a tres
también de a cuatro y más esferas. Y todos ellos comenzaron a pelearse entre sí».

El fenómeno duró aproximadamente una hora. Luego «todo ello como ofuscado por el Sol /
cayó a la Tierra desde el cielo como si todo ardiera
y con gran vapor desapareció poco a poco sobre la Tierra».
Es decir, al concluir esta especie de batalla aérea de OVNIS, muchas esferas ardieron y se precipitaron a tierra, donde se vaporizaron.
Hacia el final del espectáculo apareció, bajo las esferas, una figura alargada, «igual que una gran lanza negra». Naturalmente, toda esta «visión» se entendió en la época como advertencia divina.
Desde el punto de vista ufológico, este fenómeno se considera un avistamiento documentado ocurrido en plena Edad Moderna, si bien por sus características resulta único en los anales de la ufología. Tampoco existen otros reportes de este tipo de objeto en la tradición folklórica alemana.
El 7 de agosto de 1566, cinco años después, se reportó un episodio parecido en la ciudad suiza de Basilea. En esta ocasión, cientos de ciudadanos atemorizados presenciaron, también al amanecer de ese día, otro enfrentamiento aéreo entre una serie de esferas negras, el que se prolongó por varias horas. El periódico local describió así este episodio:

«se vieron en el aire muchas esfera negras que hacia el Sol
se desplazaban con gran rapidez y celeridad
y también volviéndose unas contra otras libraban disputa
tornándose algunas rojas y fogosas
y luego se consumieron y disolvieron».


En una octavilla elaborada en agosto de 1566 por Samuel Coccius, «estudioso de las Sagradas Escrituras y de las artes liberales, súbdito de Basilea» está representada esta situación:


Fenómeno celeste de Basilea. 1566

La ciencia moderna ha sugerido como explicación a estos dos episodios un fenómeno óptico llamado parhelio (foto inferior) , de común ocurrencia, asociado con la reflexión/refracción de la luz, y producido por la presencia de una gran cantidad de partículas de hielo en las nubes cirros, las que actúan como prismas. Parecidos a otro fenómeno llamado halo, con el que pueden coincidir, se presentan a unos 22° a la derecha o izquierda del sol, como manchas brillantes y hasta coloridas en el cielo. Pueden ser vistas en cualquier época del año y lugar del mundo.




Panhelio en foto de New Ulm, Minnesota, 2005
(Wikipedia)

¿Les resulta convincente esta explicación?